¡Hola Viajeros!
El último fin de semana de junio de 2020 lo hemos pasado en la provincia de Segovia y aprovechamos una tarde para acercarnos a ver el pueblo de Sepúlveda y las Hoces del Río Duratón.
¿Cómo llegar?
Sepúlveda se encuentra en la provincia de Segovia, de la que queda a una hora. Tampoco está muy lejos de Madrid o Valladolid, ciudades desde las que se tarda una hora y media en llegar.
La forma más cómoda de ir, puede que la única, es con el coche. Si no disponéis de uno lo mejor será que lo alquiléis, así os dará libertad para programar la visita y luego poder desplazaros hasta las Hoces.
¿Dónde alojarse?
Nos encantaría poder recomendaros un lugar de primera mano, pero eso no es posible. La realidad es que tenemos una casa particular por esa zona por lo que siempre nos quedamos allí.
No obstante si miráis en Booking, podéis ver una amplia oferta de hoteles, pensiones y hostales. Echando un vistazo rápido hemos encontrado la Posada de San Millán y nos hemos quedado maravillados con lo que hemos visto. Se trata de una casa de estilo rústico en el que las habitaciones dan a un patio interior. Os hemos dejado la web por si queréis ver las tarifas del alojamiento y fotos.
Qué ver en Sepúlveda
No era nuestra primera visita pero esta vez lo hemos disfrutado muchísimo. El simple hecho de perdernos por sus calles empedradas, acercarnos hasta la iglesia y tomarnos un café en la bonita plaza de España, ya nos ha parecido perfecto y un planazo después de estos meses de duro encierro.
La verdad que no teníamos nada planeado, dimos una vuelta sin rumbo y nos fuimos haciendo fotos en distintos lugares del pueblo. Sus calles nos parecieron de lo más pintorescas.
No os marchéis sin ver la muralla y sin tomaros un buen café o cerveza en la plaza.
Puesta de sol en las Hoces del Río Duratón
Esta vez no íbamos con planes de hacer una marcha por el parque, aunque ya os adelantamos que se pueden hacer caminatas y también alquilar piraguas para admirar las hoces desde el agua.
En nuestro caso quisimos ir a ver el atardecer y para eso un lugar perfecto es ir hasta la Ermita de San Frutos.
La Ermita se encuentra a 20 minutos de Sepúlveda en coche. Los últimos kilómetros hasta llegar al parking de la ermita son una pista de tierra y hay que ir despacio. El parking es gratuito.
Al inicio del sendero veremos que se divide en dos caminos, uno que lleva hasta un mirador y el otro que continúa hasta la Ermita. Nosotros fuimos al mirador primero para aprovechar la poca luz que quedaba y hacernos unas fotos. Luego continuamos hasta la Ermita, que está un poco más lejos del parking.
Ver el atardecer en las Hoces fue lo mejor, nos quedamos prácticamente solos y lo disfrutamos muchísimo. Os animamos a ir en los últimos momentos del día, si queréis una prueba de lo bonito que es, fijaros en la foto de portada del post. Los colores son asombrosos.
Y hasta aquí llega este breve post, que esperamos os pueda servir para darle una oportunidad a las Hoces y a los pueblos tan bonitos que tenemos esparcidos por toda la geografía de España.
Nos despedimos ya pero nos gustaría recordaros que ya tenéis publicados post de Tenerife, La Palma y Baleares, por si queréis ir mirando algún destino chulo para este verano.
¡Hasta pronto viajeros!
Los viajes de Eriel 
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